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Una organización política y técnica municipal por propósitos: la experiencia de Sant Boi de Llobregat

Entrevista a José Ángel Carcelén Luján, Teniente de alcaldía del Área de actuación política de Ciudad Sostenible y Saludable en el ayuntamiento de Sant Boi de Llobregat.


El Ayuntamiento de Sant Boi de Llobregat es una entidad local, perteneciente a la Fundación Kaleidos.red, que se caracteriza por una organización política y técnica municipal por propósitos, esto es, orientada al desarrollo e implementación de la agenda urbana. Para conocer más acerca de cómo ha evolucionado hasta establecer un organigrama técnico y político por propósitos, hablamos con su primer Teniente de alcaldía del Área de actuación política de Ciudad Sostenible y Saludable, José Ángel Carcelén Luján.

¿Qué ventajas tiene esta organización por propósitos?

Permite alinear de manera más efectiva las diferentes políticas y mejorar los mecanismos de coordinación entre ellas. Pero sobre todo permite distribuir el liderazgo e impulso de las 45 líneas estratégicas del plan de acción de la agenda urbana local entre los 4 ámbitos. Esas líneas estratégicas, si bien se trabajarán de manera transversal y afectan a diferentes áreas, requieren de la definición de un referente político y directivo que vele por su implementación y coordine el avance en su implementación.

Con esta distribución queda claro quién las irá impulsando y coordinando a lo largo del mandato y en quién recae la responsabilidad de rendir cuentas de su avance ante el equipo de gobierno y la dirección técnica. Por eso son clave las figuras de los y las tenientes de alcaldía referente en cada ámbito de coordinación, así como aquellos directores o directoras de área que además de dirigir de manera orgánica un área sectorial, deberá coordinar de manera funcional un conjunto de líneas estratégicas de la agenda urbana local.

Organización por competencias:

Organización por propósitos. Distribución de las acciones estratégicas de la Agenda Urbana por ámbitos y áreas:

En el modelo tradicional, la autoridad pertenece siempre al jefe. ¿Cómo se organiza en Sant Boi la corporación?

La holocracia es una nueva forma de administrar una organización, a través de la remoción del poder de una estructura jerárquica, sustituida por un sistema de distribución de la autoridad. Una de las principales diferencias de la organización de una empresa a través de la holocracia es la eliminación de una estructura en la que cada persona tiene un cargo fijo y la función de cada trabajador es descrita en un organigrama.

El sistema propone una estructura en la que el empleado desempeña múltiples funciones dentro de la organización, participa de diferentes equipos a la vez y sus tareas son constantemente actualizadas para adaptarse mejor a las necesidades de su equipo. La idea es que la organización pueda aprovechar mejor las habilidades del trabajador, dando total libertad para que exprese su creatividad. En la holocracia, la autoridad es distribuida entre el equipo con funciones específicas y con responsabilidades para la toma de decisiones sobre el tema objeto de trabajo.

En estos momentos estamos estableciendo los diferentes equipos, atendiendo a perfiles de la organización que puedan contribuir al impulso y desarrollo de esos proyectos más allá de sus responsabilidades orgánicas. Esto nos está permitiendo detectar talento interno y generar nuevos liderazgos en la organización de cara al necesario relevo generacional.

En un contexto como el actual de gran complejidad, máxima incertidumbre y de un creciente descrédito de las instituciones públicas, se necesita refundar las políticas tradicionales de participación ciudadana, transitando de órganos estables y rígidos a procesos dinámicos y flexibles, y de espacios de consulta y legitimación de las actuaciones eminentemente públicas a espacios de experimentación y colaboración corresponsable en la construcción de propuestas ya sean públicas, privadas o mixtas. ¿Cómo es el trabajo de Sant Boi en materia de participación ciudadana?

En Sant Boi nos hemos propuesto superar la lógica de la participación ciudadana tradicional, manteniendo aquellos instrumentos ya existentes, pero creando iniciativas innovadoras bajo esta nueva lógica. Y, en este sentido, la Agenda urbana es una oportunidad, en la medida en que requiere de la creación de espacios de gobernanza y seguimiento, que aprovecharemos para que actúen como embrión de ese nuevo marco de relación, y que por su naturaleza como instrumento de planificación urbana multidimensional permite la implicación de actores que hasta ahora no habían estado suficientemente presentes en los órganos tradicionales de participación; empresas, colectivos profesionales, centros de conocimiento….

Pasamos pues de un marco de relación centrado principalmente en el tejido asociativo de la ciudad, a un marco mucho más amplio que toma como referencia la cuádruple hélice: las empresas, el sector social, las instituciones y los centros de conocimiento. La agenda urbana ofrece la posibilidad de sentar a estos diferentes actores y sumarlos a una dinámica distinta que hasta ahora, fortaleciendo la capacidad de generar alianzas y el propio ecosistema local.

El Espacio Beta es un espacio de experimentación para jóvenes con talento para que, a la vez que desarrollan en un entorno innovador sus proyectos personales o colectivos, se implican en la construcción colectiva de la ciudad. ¿Cómo nace?

El espacio Beta es un espacio físico de 200 m2 integrado en el Laboratorio de Innovación Pública Coboi Lab. Nace de la voluntad política de ofrecer un espacio a jóvenes con talento, o sea, aquellos y aquellas que han ido participando en iniciativas de emprendimiento en sus centros de estudio o cuyos trabajos académicos han sido premiados, etc, para que experimenten y pongan en marcha sus proyectos en un entorno que favorezca la creatividad y la innovación.

Nace también con la voluntad de prepararnos como ciudad para dar respuesta, ágil e inmediata, a una tipología de necesidades que vendrán y que a día de hoy aún no podemos prever al 100%. Un espacio proyectado sobre la hipótesis de que la ciudad, en el momento de ofrecer servicios a la ciudadanía, debe disponer de un sitio público lo suficientemente flexible y acondicionado a las necesidades cambiantes, incluso para aquellas que aún no se han previsto. Hemos comenzado poniendo el foco en la gente joven (entre 18 y 35 años), con espíritu emprendedor y creativo, que quiera desarrollarse profesional y personalmente en su propia ciudad.

Durante los últimos meses, el equipo de Coboi lab ha invitado a diferentes jóvenes para co-idear este espacio de manera colaborativa, con el objetivo de que sean los propios y propias jóvenes quienes diseñen en qué ha de consistir y cómo ha de funcionar. A partir de ahí, han colaborado en el diseño de este espacio también otros departamentos del Ayuntamiento, principalmente: Juventud, Servicios Digitales y Empresa. Entre todos han valorado necesidades potenciales y servicios que podrían articularse desde este nuevo espacio. De esta manera, hemos visualizado y valorado como el Espacio Beta podría enriquecer algunos de sus proyectos.

Sant Boi forma parte de la Fundación Kaleidos. ¿Qué papel ha tenido en materia de planificación estratégica y participación ciudadana?

La pertenencia a Kaleidos nos ha permitido compartir y contrastar nuestra reflexión con otras ciudades con las que nos une la apuesta histórica por implementar servicios y equipamientos de proximidad, la curiosidad por mejorar la gestión pública y la voluntad de aprender e intercambiar experiencias con otras ciudades.

Una de las fortalezas de Kaleidos es la diversidad geográfica y la pluralidad política de sus miembros, que garantiza una visión amplia e integradora de las políticas públicas. Otra de sus fortalezas es que Kaleidos parte del análisis y el intercambio de conocimiento a través de personas expertas para llegar a la acción, ideando y prototipando herramientas tangibles y concretas que sean útiles y puedan ser implementadas por cualquier ciudad, sea miembro o no de la red.

El objetivo es que nuestra experiencia local sirva de base para la elaboración de un modelo Kaleidos que pudiera replicarse y ser transferido a aquellas ciudades compañeras de fundación y otras que quieran asumir el reto de transformar sus organizaciones a la luz de la agenda urbana.